Si este es tu objetivo o, al menos, contar con ella durante largo tiempo ten muy presentes estos consejos:
En primer lugar, mientras tengan flores, no las expongas al sol directo. Deberás mantenerlas cerca de una ventana o en una terraza donde reciban claridad.
Por el contrario, cuando pase la floración, siémbralas en una maceta más grande y ponlas al sol directo o plántalas en el jardín directamente.
En cuanto a sus necesidades de agua, mantenlas con el substrato entre las raíces húmedo y riégalas solamente cuando lo sientas prácticamente seco.
Si los días son muy calurosos, puedes rociarlas con agua en las hojas para refrescarlas sin necesidad de humedecer la tierra excesivamente.
Humedad: Este punto es clave. Si el ambiente es seco, las hojas se caen. Odia la calefacción fuerte. En casa ubicar sobre una capa de guijarros con agua en un cuenco o plato hondo.